domingo, 12 de agosto de 2012

Al pie de la letra


Después de un largo recorrido, llega una mujer a ver al brujo de la región.

"¡Por favorcito, hágame aste' el favor de ir conmigo a ver a mi Tata, ya está muy viejito y no puede venir desde el rancho hasta acá y está muy enfermito!"

"¡Pero 'onde lo va usté a creer... tengo mucha gente, no puedo!

"¡Andele, no sea malito, si no qué hago, ni modo que deje morir a mi Tata!"

"Pos... mire, le voy a dar el remedio, pero lo tienen que seguir al pie de la letra, todo lo que yo diga lo tienen que hacer pero toditito al pie de la letra..."

"¡Lo que usté me diga con tal de curar a mi Tata!"

El brujo le explica a la mujer todo lo que tenía que hacer con el viejito y después de asegurarse de que le había entendido, le insiste en que tiene que ser al pie de la letra.

Como pasó el tiempo y la señora no regresó, el brujo fue a verla un día a su casa.

"Buenas tardes... ¿Y qué pasó con su Tata, ya se curó?"
"¡Nooo, figúrese asté' que se nos murió!"

"¡Pero cómo!, ¿qué no le hicieron lo que le dije?"

"¡Claro que sí, al pie de la letra como asté' dijo!"

"Y entonces ¿cómo fue que se murió?"

"Pos verá, primero cortamos unas ramas de ruda y cmo asté' dijo, las dejamos serenar y aluego se las pasamos por toditito el cuerpo, aluego le untamos el aceitito que nos dio, y aluego, como asté dijo, lo empezamos a sobar con un huevo, primero iba bien, pero ya cuando le llevábamos el huevo estirado hasta el ombligo, pos nomás dio un grito y ai quedó mi Tata..."

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